Domingo Jiménez Beltrán: “Defendemos la España solar y lo que tenemos es un país hecho un solar”

COMPROMETIDOS CON EL PLANETA

ESPAÑA | 20.04.2011 | 17:32 M.AMBIENTE-ENTREVISTA

Domingo Jiménez Beltrán: “Defendemos la España solar y lo que tenemos es un país hecho un solar”

Madrid, 20 abr (EFEverde).- Domingo Jiménez Beltrán, experto en temas medioambientales, es vicepresidente de la Fundación Energías Renovables (FER) y coordinador de Retorna, una asociación que pretende implantar un nuevo sistema de depósito, devolución y retorno de envases (SDDR).

El ex director de la Agencia Europea de Medio Ambiente, Domingo Jiménez Beltrán durante una visita a la redacción de EFEverde

Ha sido el primer director de la Agencia Europea de Medio Ambiente (1994-2002) y fundador del Observatorio Español para la Sostenibilidad y asesor de prácticamente todos los gobernantes que ha tenido nuestro país desde 1992.

“La Ley de Residuos en España es errónea y un fracaso”

Pregunta.- El proyecto de Ley de Residuos y Suelos Contaminados se encuentra en estos momentos en fase parlamentaria ¿Cómo valora la ley?.

Respuesta.- La política de residuos tanto en España como en Europa es errónea y un fracaso. Desde un principio se planteó gestionarlos en lugar de reducirlos. Alrededor de la gestión se ha creado un aparato económico tremendo. Hecha esta salvedad, la Ley de residuos tiene un aspecto positivo: es importante que salga adelante, mejorada, y adaptándose a lo que son las necesidades españolas. España tiene un déficit tal en materiales, en energía, empleo, que debemos hacer todo aquello que contribuya a reducir cargas. España está sucia y tiene un coste enorme.

P.- ¿Qué aspectos habría que mejorar?

R.- Habría que avanzar en el tratamiento y gestión de la fracción orgánica; en la reducción de las bolsas de plástico y la normativa sobre envases y embalajes debería ser mucho más avanzada y más futurista.

P.- Usted es presidente de Retorma que promueve la creación en España de Sistemas de Depósito, Devolución y Retorno (SDDR) de envases de alto consumo. ¿Por qué es importante hacer algo en materia de envases y embalajes?.

R.- Porque es la fracción que más crece y la que está más ligada al consumo. Solo en España este tipo de envases alcanzan los dieciocho mil millones al año. Además, está hecha de materiales muy nobles: vidrio, aluminio, hojalata y polietileno. En vez de gestionar los residuos hay que reducirlos y por ello hay que promover una nueva política con proyectos “buques insignia” que representen ese cambio.

“Lo que abandonas no vale”

P.- Qué es un residuo?

R.- Es algo que su poseedor destina al abandono. Y lo que abandonas no vale. Si una botella no vale nada, la tiro a la basura. Si la misma botella cuesta 25 céntimos y cuando la llevo a la tienda me la reembolsan ya no es un residuo, es un recurso. Esta idea es importante porque estos envases se consumen fuera de la casa y fuera del circuito hostelero. Por tanto, son los más sensibles a quedarse abandonados. El sistema actual penaliza al que recoge porque no ve las ventajas, y de alguna forma gratifica al que no lo hace porque no realiza ningún esfuerzo.

P.- Retorna aboga porque la ley de residuos recoja la obligatoriedad de este sistema frente a la voluntariedad que proponen las organizaciones que gestionan la recogida de este tipo de envases. ¿Por qué obligatoriedad frente a voluntariedad?

R.- Porque creemos, como demuestran los resultados, que la voluntariedad tiene un límite. Recoge menos, es de menos calidad y, además, no crea un incentivo para el que lo hace bien y un desincentivo para el que lo hace mal.

P.- Tanto Ecoembes como Ecovidrio ponen en duda la eficacia de este sistema y critican el alto coste de su implantación, que alcanzaría, dicen, los 500 millones de euros ¿Qué tiene que decir sobre esto?

R.- Los datos demuestran que este sistema es más eficaz y más eficiente. Aquí se está recogiendo un 30% frente a Alemania que recoge con el sistema SDDR el 98,5%. ¿Es más costoso?. Nuestros datos dicen que no. Los gastos de implantación son muy parecidos al coste del sistema integrado de gestión (SIG) que hay ahora. El coste para el envasador y productor con el SDDR en Alemania es similar. Con el SDDR contamos, además, con los ingresos extras de los que no devuelven el envase y el transporte se abarata. Además, un sistema de este tipo puede generar unos 26.000 empleos.

“Nos hemos rendido a convivir con aire contaminado por la primacía del coche”

P.- La “boina de contaminación que hace unos meses asfixió a Barcelona y Madrid reabrió la polémica medioambiental en torno a las medidas que se deben adoptar ¿Qué estamos haciendo mal?

R.- Todo. Estamos dando la espalda a medidas preventivas. Nos hemos rendido a convivir con un aire contaminado por la primacía del coche. Los consumidores hemos desarrollado una dualidad: cuando la contaminación viene de una industria ponemos el grito en el cielo pero si la produce nuestro coche nos da lo mismo. Nos estamos tragando nuestra propia porquería.

La mayor parte de la contaminación atmosférica se debe a lo que se denomina emisiones difusas: las residenciales y el tráfico. Las emisiones de las industrias cada vez tienen menos peso y están más controladas mientras que las difusas no. También contribuye la cultura del derroche en la energía que no relacionamos con la contaminación. El gran desafío que tenemos en materia de contaminación atmosférica está en controlar y reducir las contaminaciones difusas.

“No hay más sostenibilidad sin mejor fiscalidad”

P.- Frente a la nueva estrategia de transporte de la Comisión Europea para 2050 que incluye medidas con implicaciones fiscales, la ministra ha dicho que sostenibilidad no es igual que fiscalidad. ¿Qué opina usted?.

R.- Pues yo le contesto a la ministra que no hay más sostenibilidad sin mejor fiscalidad. Si la fiscalidad no orienta políticas quién las va a orientar. Estoy claramente en desacuerdo con la ministra porque la sostenibilidad implica una economía eficaz y eficiente y eso se consigue con unos precios que reflejen los costes, y éstos han de ser indicativos de las políticas. En Dinamarca, poner un coche en la calle conlleva un 63% de impuestos. Aquí, si respondiéramos a los fabricantes llevarían incentivos.

“La Ley de Economía sostenible es regresiva”

P.- Usted ha calificado la Ley de Economía Sostenible de “regresiva”. ¿Puede explicar por qué?

R.- Porque no aporta nada sustancial al elemento básico de una economía sostenible: contribuir a una economía más eficaz y eficiente. La sostenibilidad coincide con la economía pero con la economía buena y ésta tiene dos partes: producir lo que se necesita y de forma eficiente. Cuál es el sistema: crear un mercado que apoye la sostenibilidad y no lo contrario. La gente se refiere al mercado como algo que está ahí. Mentira.

Hay tantos mercados como tú quieras. El mercado también es el resultado de una opción estratégica. En ese mercado favoreces cierto tipo de productos u otros. Por tanto, una ley de economía sostenible que no tiene instrumentos económicos y fiscales para hacer una producción y un consumo sostenible es una ley que no es progresiva desde el punto de vista de la sostenibilidad. En materia energética, por ejemplo, la ley ha ampliado los periodos de vida de las centrales nucleares. Es una ley fallida.

“Industria está prisionera del sector energético y en particular del sector eléctrico”

P.- Qué retos tiene por delante España?.

R.- Sobre todo el energético. España es un país muy dependiente en energía y es uno de los más ineficientes en su uso. Si tú abordas adecuadamente el desafío energético abordas la desernergización y la descarbonización y por tanto la calidad del aire. España debería plantearse para 2030 un escenario de 100% de energía eléctrica de origen renovable porque puede. Somos el país que tiene más potencial en renovables,

P.- Y por qué no se hace?

R.- Porque las empresas energéticas están más involucradas en el negocio no renovable. El ministerio de industria está prisionero del sector energético y en particular del eléctrico. El ministerio está prisionero del déficit de tarifa. ¿Cómo puede ser que estén amortizadas las eléctricas y sigamos pagando?; ¿que estén amortizadas casi las nucleares y estemos pagando?; ¿que Iberdrola bombee su energía nuclear por la noche y luego la venda como hidráulica?.

“A la política española le ha matado el cortoplacismo”

P.- ¿Por qué ha pasado esto?

R.- A la política española le ha matado el cortoplacismo y es lo que nos está diferenciando de países como Alemania que se ha planteado políticas de medio y largo plazo. Ahora mismo mi esperanza está en que el Gobierno haya renunciado a ganar las elecciones y por tanto haga lo que tiene que hacer y a lo mejor hasta las gana. Nadie entiende por qué no hay un plan de rehabilitación de viviendas. Aquí hay una fuente de empleo impresionante. En España nos hemos rendido al corto plazo y eso significa rendirse a la especulación.

P.- Desde Europa, ¿no se puede incentivar más las políticas energéticas?

R.- Si, con impuestos. La Comisión Europea ha planteado por primera vez impuestos comunitarios para políticas comunitarias. Impuestos sobre los carburantes y sobre la electricidad. Pero eso sí, luego han de regresar al ciudadano con sistemas finalistas en programas de incentivos para las energías renovables, de I+D_

Espero que haya una iniciativa comunitaria pidiendo un impuesto comunitario sobre la energía porque es lo que nos va a salvar a los intereses nacionales.

“Hemos defendido la España solar y lo que tenemos es un país hecho un solar urbano”

P.- Hay algún ejemplo internacional en el que podamos mirarnos?

R.- Dinamarca es un ejemplo. Es un país que ha hecho de la industria eólica una señal de identidad nacional. Aquí hemos defendido la España solar como identidad española, y en su lugar tenemos una España hecha un solar urbano. Dinamarca se ha impuesto como objetivo ser “libre de fósiles” y eso que tiene poca energía solar. Alemania no le va lejos. La referencia deberían ser aquellos países que tienen políticas de medio y largo plazo. España no ha aprendido todavía a pensar en esos términos.

“El futuro es la democracia prospectiva”

P.- Usted es miembro del consejo asesor de la Fundación Equo que concurrirá a las elecciones generales de 2012 por primera vez. ¿Qué ofrece Equo que no tengan las demás formaciones políticas?

Estoy en el Consejo asesor de Equo porque pretende cambiar el modelo y hacerlo más participativo. Debemos ir hacia una mayor capacidad política informada y hacia una capacidad política participativa. El futuro es la democracia prospectiva y por tanto hay que apoyar a partidos que se ocupan del futuro. Queremos menos realidades y más promesas y aquí estamos amargados con las realidades. Los jóvenes de hoy quieren futuro. Se necesitan nuevos esquemas de desarrollo político y nuevos esquemas adaptados a lo que hoy son las tecnologías: internet… Hacen falta revulsivos. Las personas están reclamando imaginación.

P.- Japón ha traído con más virulencia el debate sobre la energía nuclear. ¿Que opina usted sobre este tema?

R.- Muchos pensamos lo mismo antes y después de Fukushima porque ya estaba en el guión: podía ocurrir. De las tres energías: el carbón, la nucleares y las renovables solo una es sostenible. La energía nuclear tiene de insostenibilidad prácticamente todo: traslada costes y desafíos al futuro durante muchos años, es una tecnología inmadura e ineficiente porque no fisiona el material y es vulnerable a diferencia de la eólica que no necesita una seguridad activa. EFEverde